vino natural
Nuestros criterios
En Garage Store, reconocemos el vino natural como un vino sin aditivos, no clarificado y no filtrado durante su proceso de vinificación. Desde el año 2017, hemos estado seleccionando productores de vino natural en su lugar de origen, conociendo de primera mano sus viñas, pidiendo analíticas de cada uno de sus vinos y asegurándonos de que cumplan con los siguientes criterios para ofrecer a nuestros clientes el mejor producto y una credibilidad confiable.
Viticultura ecológica o biodinámica y trabajo manual en bodega. Uso de levadura indígena solamente. Nunca levaduras comerciales. Sin agregar sulfitos o en última instancia, en mínimos niveles debajo de 30mg/l. Vinos sin filtrar, sin clarificar y sin aditivos enológicos. Definimos al bodeguero de vino natural como aquel que cultiva su propia viña recuperando especialmente las variedades locales de su zona, siguiendo todos los trabajos del ciclo anual de su viña manualmente y que basa ese cultivo en la agricultura ecológica/ biodinámica. No consideramos vino natural el vino sin sulfitos o con mínima cantidad elaborado con uvas provenientes de agricultura convencional, ni de uvas compradas de dudosa procedencia.
No nos guiamos por etiquetas de moda o por la fama “mundial” en redes sociales para la elección de nuestras bodegas, ya que comprendemos muy bien que nuestro sector es pequeño y la “fama mundial” es humo de instagram, ya que sin una regulación específica para el sector, en cada país, las distintas distribuidoras manejan diferentes criterios de elección de bodegas algunos más intervencionistas que otros.
¿Por qué en la etiqueta de un vino natural está escrita la frase “contiene sulfitos” ?
Un vino natural, por lo general, contiene una ínfima cantidad de sulfitos que se generan naturalmente debido a la oxidación durante su elaboración o a la presencia de azufre de regiones volcánicas, entre otros motivos (aproximadamente entre 3 y 10 mg por litro). Estos sulfitos naturales contribuyen a la preservación natural del vino y no tienen nada que ver con los sulfitos añadidos, que son productos de síntesis en laboratorios.
Algunas bodegas se aprovechan de esta ley para crear confusión, ya que es obligatorio indicar que el vino “contiene sulfitos”, pero no se especifica la cantidad. Otras bodegas optan por poner “Sin sulfitos añadidos”, dando a entender que, aunque los sulfitos están presentes, son naturales. Algunas bodegas que desean proporcionar más información al consumidor eligen indicar el nivel real y existente de sulfitos en sus vinos.
Las distribuidoras tienen la responsabilidad de velar por que la información de sus bodegas sea clara y verídica.
La inmensa mayoría de los vinos ecológicos llevan sulfitos añadidos hasta 120 miligramos por litro.
DIFERENCIAS ENTRE EL VINO NATURAL/ BIODINÁMICO/ ECOLOGICO.
Vinos convencionales: Agricultura convencional que se caracteriza por el uso de métodos y prácticas que incluyen la aplicación de productos químicos y sintéticos para aumentar la producción y proteger los cultivos: Uso de Pesticidas y Herbicidas Sintéticos. Fertilizantes Químicos. Semillas Modificadas Genéticamente. Mecanización Intensiva en vendimia, poda y vinificación como maquinaria y tecnología para optimizar la producción sin importar el desgaste de la planta, deterioro de la diversidad o del producto final. Irrigación Intensiva: Dependencia de sistemas de riego para garantizar el suministro de agua, especialmente en regiones con escasez de lluvias. En cuanto al vino: Se permiten aditivos diversos aditivos químicos para modificar las características naturales del vino que pueden resultar inconvenientes. Algunos de los aditivos enológicos comunes permitidos en la vinificación convencional incluyen: Ácido tartárico sintético para ajustar la acidez. Enzimas para facilitar la extracción de compuestos durante la maceración o la fermentación, o para mejorar la clarificación del vino. Levaduras seleccionadas para controlar y dar forma al proceso fermentativo natural del vino. Clarificantes y estabilizadores. Ácido ascórbico para prevenir la oxidación entre otros.
En cuanto a los sulfitos: El nivel permitido de Dióxido de azufre (SO2) en vinos convencionales es:
Vinos Tintos 150 / 170 mg/.l
Vinos Blancos y Rosados: 200 / 250 mg/l.
Otros vinos: No se especifica claramente.
(Reglamento CE Nº 606/2009).
Vino Ecológico: Cultivo sin pesticidas ni herbicidas sintéticos. Se permiten abonos y fertilizantes orgánicos. En el vino: Se permite el uso de aditivos sintetizados de origen natural como el ácido tartárico que funciona como corrector de acidez u otros. Sobre aditivos químicos de síntesis como los sulfitos: Anhídrido sulfuroso (SO2). Bisulfito de potasio o metabisulfito de potasio en los siguientes niveles:
Vinos Tintos 100 / 170 mg/.l
Vinos Blancos y Rosados: 200 / 150 mg/l.
Otros vinos: No se especifica claramente.
(Reglamento de Ejecución UE Nº 203/2012 sobre prácticas en el vino ecológico).
Vino Biodinámico: Certificación denominada Demeter que busca la eliminación de químicos, permitidos en la agricultura ecológica. Sigue el calendario lunar y utiliza preparados naturales para combatir plagas y revitalizar los cultivos. En cuanto al vino permite el uso de aditivos enológicos de síntesis para corregir, modificar, aclarar o filtrar el vino con un criterio similar a la legislación del vino ecológico. A excepción de los sulfitos que como regla general sólo permiten hasta 60 mg/l.
Vino Natural: Utiliza uvas cultivadas en agricultura ecológica, bajando o eliminando en lo posible los niveles de cobre y azufre permitidos en esta. En el vino: Sin aditivos químicos. En cuanto a los sulfitos: Un vino natural a lo sumo puede tener un residuo de 3 a 10mg/l de sulfitos no añadidos y en su modo más laxo permitiendo el nivel total máximo de 30 mg/l en el caso de que los sulfitos sean añadidos durante la fermentación o antes del embotellado. El vino natural no está regulado y estos datos se basan en parámetros de reputadas asociaciones de vino natural italianas y francesas, así como también de ferias internacionales de vino natural de larga trayectoria en nuestro país como por ejemplo Vella Terra, todas de estas instituciones verifican a sus bodegas mediante rigurosos análisis.
Características organolépticas del vino natural.
Es fundamental que un sommelier profesional nos aconseje sobre el tema. Tener una base sólida es importante para enseñarnos lo mejor que pueden ofrecer las distintas variedades de uva y sus respectivos terruños en cuanto a organoléptica y otras consideraciones. Dicho esto, sabemos muy bien que para entender el vino natural se deben dejar de lado ciertos criterios de la vieja escuela y entrenar el paladar para catar y disfrutar de los vinos naturales que no llevan correcciones o modificaciones químicas.
El vino natural debe ser equilibrado, expresar su variedad y su territorio; debe tener acidez marcada y, dependiendo de la variedad, podemos encontrar olores familiares a bosque, distintos tipos de frutos y flores. No debe saber ni tener olores desagradables. La mayoría de las veces, catar un vino natural es una experiencia diversa a la de catar un vino ecológico o un vino convencional, que nos darán sabores y olores bastante manipulados y corregidos según el gusto del mercado. Nos daremos cuenta de que el sabor crudo de cada variedad sin intervenciones en el vino natural es el sabor real de esa variedad en una añada determinada. Si el viticultor es un verdadero artesano, dará como resultado vinos genuinos, gustosos y de gran calidad que a lo sumo necesitarán abrirse un poco para soltar toda su esencia.
Queremos dar a nuestros clientes calidad y que comprendan las bondades del mundo del vino natural que emparejado con un producto ecológico y de temporada, sea fácil de integrar al cuerpo e incluso beneficioso, que nos dé alegría, y nos haga compartirla.
Nos gusta el vino bien elaborado y saber de lo que hablamos cuando aconsejamos. Por ello en nuestra tienda encontrarás vinos seleccionados por Stefano Fraternali, sumiller titulado con más de 15 años de experiencia en la cata de vinos naturales.
Desde nuestros inicios, hemos apostado únicamente por este sector, por criterio y sentido común. No dividimos nuestro catálogo con vinos convencionales, ni siquiera con vinos ecológicos. Lo hacemos también por respeto al los elaboradores de vino natural, artesanos con amplia experiencia en vinificaciones sin intervenciones y que llevan generaciones elaborando añadas cada vez mejores, porque aman el vino y su terruño.
Consumo moderado de vino natural.
El consumo moderado de vino (cualquier tipología) se ha asociado con algunos posibles beneficios para la salud, principalmente debido a los compuestos antioxidantes presentes en la piel de las uvas. Estos beneficios potenciales incluyen el resveratrol, un antioxidante que se encuentra en la piel de las uvas rojas y que puede tener propiedades cardioprotectoras. También se ha sugerido que el consumo moderado de vino tinto podría mejorar la salud cardiovascular al aumentar el colesterol HDL (colesterol “bueno”) y reducir la formación de coágulos. Además, los polifenoles y otros antioxidantes en el vino pueden ayudar a combatir el daño oxidativo en el cuerpo.
Por ende, un vino cuanto más se acerque a lo ecológico, biodinámico o natural en su integral elaboración siempre que se respeten criterios sanitarios y legislativos potenciará esas propiedades y tendrá mejores probabilidades de ser fácilmente digerido y metabolizado por nuestro organismo.
Por otra parte, la metabolización del alcohol por nuestro hígado es más “limpia” debido a la ausencia o reducción de químicos y aditivos que, en el proceso de descomposición, pasan directamente al sistema sanguíneo y digestivo, pudiendo producir jaquecas o malestares estomacales. Se dice que los vinos naturales “no suelen dar resaca”.